Introducción
Los waffles caseros son una opción deliciosa y versátil para comenzar el día con energía. Con una textura crujiente por fuera y suave por dentro, esta receta te permitirá disfrutar de un desayuno especial sin complicaciones. Además, puedes personalizarlos con diferentes toppings y sabores según tu preferencia.
Ingredientes
Para preparar estos waffles necesitarás:
2 tazas de harina de trigo
2 cucharaditas de polvo de hornear
½ cucharadita de sal
2 cucharadas de azúcar
2 huevos
1 ¾ tazas de leche
½ taza de mantequilla derretida
1 cucharadita de esencia de vainilla
Instrucciones
Preparar la mezcla seca: En un tazón grande, tamiza la harina, el polvo de hornear, la sal y el azúcar. Mezcla bien.
Batir los ingredientes líquidos: En otro recipiente, bate los huevos y agrega la leche, la mantequilla derretida y la esencia de vainilla.
Integrar la mezcla: Vierte los ingredientes líquidos en los secos y mezcla suavemente hasta obtener una masa homogénea. No sobrebatir.
Calentar la waflera: Precalienta tu waflera y engrásala con un poco de mantequilla o aceite en aerosol.
Cocinar los waffles: Vierte una porción de masa en la waflera caliente y cocina hasta que estén dorados y crujientes (aproximadamente 3-5 minutos).
Servir: Retira los waffles y sírvelos calientes con tus acompañamientos favoritos.
Consejos para servir y almacenar
Para un toque especial, acompaña con frutas frescas, miel, sirope de chocolate o crema batida.
Si quieres un extra de crocancia, hornéalos a 180 °C por unos minutos después de cocinarlos.
Guarda los waffles sobrantes en un recipiente hermético y refrigéralos por hasta 3 días.
Para conservarlos más tiempo, congélalos en bolsas herméticas y recaliéntalos en el tostador o en el horno antes de servir.
Variaciones