Introducción
El aloe vera ha sido durante siglos un aliado de la belleza natural, especialmente cuando se trata del cuidado capilar. Su rica composición en enzimas, vitaminas y minerales lo convierte en un remedio eficaz para estimular el crecimiento del cabello, detener la caída y aportar brillo natural. Hoy te enseñamos cómo preparar una mascarilla capilar casera y potente, ideal para fortalecer desde la raíz hasta las puntas.
Ingredientes:
2 hojas grandes de aloe vera (sábila)
1 cucharada de aceite de coco (opcional para mayor nutrición)
1 cucharada de aceite de ricino (conocido por promover el crecimiento)
5 gotas de aceite esencial de romero o lavanda (opcional, para estimular el cuero cabelludo y dar aroma)
Instrucciones:
Extrae el gel de aloe vera: Lava bien las hojas, corta los bordes espinosos y extrae la pulpa con una cuchara. Coloca el gel en un recipiente limpio.
Licúa el gel: Para obtener una textura más suave y fácil de aplicar, licúa el gel hasta que quede sin grumos.
Agrega los aceites: Incorpora el aceite de coco, el de ricino y el aceite esencial que elijas. Mezcla bien.
Aplicación: Con el cabello seco o ligeramente húmedo, aplica la mezcla en el cuero cabelludo, haciendo suaves masajes circulares para estimular la circulación. Luego, distribuye el resto por todo el cabello.
Tiempo de reposo: Cubre tu cabello con un gorro de baño y deja actuar durante 30 a 60 minutos.
Enjuague: Lava con abundante agua tibia y tu champú habitual. No es necesario usar acondicionador después.
Consejos de presentación y almacenamiento:
Puedes conservar el gel de aloe vera sin mezclar hasta por una semana en el refrigerador.
Si preparas la mezcla con los aceites, guárdala en un frasco de vidrio hermético y refrigérala. Úsala dentro de 5 días para garantizar su frescura.
Para una mejor aplicación, usa una brocha para tinte o una botella con aplicador.
Variaciones:
