🌱 Introducción
Las semillas de chía, aunque diminutas, están repletas de nutrientes que pueden transformar tu salud con solo una cucharada diaria. Estas pequeñas potencias alimenticias son una excelente fuente de fibra, proteínas, ácidos grasos omega-3, antioxidantes, calcio, magnesio y más. Incorporarlas a tu rutina es sorprendentemente fácil y delicioso. A continuación, te presentamos una receta básica para preparar un pudín de chía junto con sus increíbles beneficios y formas creativas de variarla.
🥣 Ingredientes
3 cucharadas de semillas de chía
1 taza de leche (puede ser vegetal: almendra, coco, soya, etc.)
1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional)
1 cucharadita de miel, sirope de agave o el endulzante de tu preferencia (opcional)
Frutas frescas para servir (fresas, mango, plátano, etc.)
Nueces o semillas al gusto para decorar
👨🍳 Instrucciones
En un frasco con tapa o recipiente con tapa hermética, vierte la leche y añade las semillas de chía.
Agrega la vainilla y el endulzante si los vas a usar.
Mezcla muy bien durante 1-2 minutos para que las semillas no se aglomeren.
Tapa y refrigera por al menos 4 horas, preferiblemente toda la noche.
Antes de servir, revuelve nuevamente. Agrega frutas, nueces o lo que desees.
💡 Consejos para servir y almacenar
Este pudín puede almacenarse en el refrigerador hasta por 4-5 días.
Es ideal para preparar en lote: multiplica los ingredientes y guarda en porciones individuales.
Para llevar, guárdalo en frascos pequeños con tapa.
🎨 Variantes
