Introducción: Preparar este plato es mi manera de llegar al corazón de mi marido; a él le encanta. Cada vez que lo preparo, sé que estoy ofreciendo más que solo una comida; es una experiencia llena de amor y dedicación. Este plato sencillo pero lleno de sabor ha sido parte de nuestras cenas especiales y es perfecto para sorprender a esa persona especial. Si buscas una receta deliciosa y con un toque personal, sigue leyendo.
Ingredientes:
500 gramos de pechuga de pollo
2 cucharadas de aceite de oliva
1 diente de ajo picado
1 cucharadita de orégano seco
1 cucharadita de albahaca seca
1/2 taza de crema de leche
1/2 taza de caldo de pollo
Sal y pimienta al gusto
1/4 de taza de queso parmesano rallado (opcional)
1 cucharadita de jugo de limón
Perejil fresco picado para decorar
Instrucciones:
Comienza por calentar el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Añade el ajo picado y sofríe por 1-2 minutos hasta que esté fragante.
Incorpora las pechugas de pollo previamente salpimentadas y cocínelas durante 6-7 minutos por cada lado, o hasta que estén completamente cocidas y doradas.
Agrega el caldo de pollo y deja que la mezcla hierva a fuego lento por 5 minutos, para que se impregne de sabor.
Reduce el fuego y añade la crema de leche, el orégano y la albahaca. Remueve bien y deja cocinar por otros 5 minutos hasta que la salsa espese.
Si deseas un toque extra de sabor, incorpora el queso parmesano y el jugo de limón. Cocina por un minuto más, removiendo bien.
Sirve el pollo con la salsa encima y decora con el perejil fresco picado.
Consejos para servir y almacenar:
Para servir: Acompaña este plato con arroz blanco, puré de papas o una ensalada fresca. El arroz absorbe la deliciosa salsa, lo que lo convierte en una combinación perfecta.
Para almacenar: Guarda las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días. Recalienta en una sartén a fuego bajo para que la salsa recupere su textura cremosa.
Variantes: