Introducción
¿Quieres sorprender a tu familia y amigos con una pizza casera gigante, deliciosa y crujiente? Con esta receta, aprenderás a hacer una pizza de gran tamaño con una masa esponjosa por dentro y crujiente por fuera, perfecta para cualquier ocasión. Ya sea para una reunión, una fiesta o simplemente para darte un gusto, esta receta te asegurará el éxito.
Ingredientes
Para la masa:
- 500 g de harina de trigo
- 10 g de sal
- 10 g de azúcar
- 7 g de levadura seca o 20 g de levadura fresca
- 300 ml de agua tibia
- 2 cucharadas de aceite de oliva
Para la salsa:
- 400 g de tomates triturados
- 2 dientes de ajo picados
- 1 cucharada de orégano seco
- 1 cucharadita de albahaca seca
- Sal y pimienta al gusto
- 1 cucharada de aceite de oliva
Para la cobertura:
- 300 g de queso mozzarella rallado
- 100 g de pepperoni, jamón, champiñones o el ingrediente de tu preferencia
- Aceitunas, pimientos, cebolla (opcional)
Instrucciones
- Preparar la masa
- En un bol grande, mezcla la harina, la sal y el azúcar.
- Disuelve la levadura en el agua tibia y deja reposar por 5 minutos.
- Agrega la mezcla de levadura a la harina y comienza a amasar. Añade el aceite de oliva y sigue amasando hasta obtener una masa elástica y suave.
- Deja reposar la masa en un bol engrasado, cubierto con un paño, durante 1 hora o hasta que duplique su tamaño.
- Hacer la salsa
- En una sartén, calienta el aceite de oliva y sofríe el ajo picado.
- Añade los tomates triturados, el orégano, la albahaca, la sal y la pimienta. Cocina a fuego medio durante 10 minutos hasta que espese.
- Formar la pizza
- Precalienta el horno a 220°C.
- Estira la masa sobre una bandeja enharinada, dándole forma de pizza gigante.
- Extiende la salsa sobre la masa y añade el queso y los ingredientes elegidos.
- Hornear
- Hornea la pizza durante 15-20 minutos o hasta que la masa esté dorada y el queso burbujeante.
- Retira del horno, deja reposar unos minutos y disfruta.
Consejos para Servir y Almacenar
- Servir caliente: La pizza es mejor recién salida del horno, acompañada de una ensalada fresca o una bebida fría.
- Recalentar correctamente: Para mantener la textura crujiente, calienta en un sartén tapado o en el horno a 180°C por 5 minutos. Evita el microondas, ya que ablanda la masa.
- Almacenamiento: Guarda los restos en un recipiente hermético en la nevera hasta por 3 días o congela por un mes.