Introducción:
Las papas al horno son uno de los acompañantes más versátiles y deliciosos que puedes preparar. Ya sea como guarnición o como plato principal, este sencillo pero sabroso plato puede adaptarse a cualquier ocasión. Con una textura crujiente por fuera y suave por dentro, son ideales para cualquier comida. Te presentamos una receta fácil y infalible para que tus papas al horno siempre salgan perfectas.
Ingredientes:
4 papas medianas (preferiblemente de la variedad Russet o Yukon Gold)
3 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de pimienta negra
1 cucharadita de ajo en polvo
1 cucharadita de romero seco o fresco picado
1 cucharadita de tomillo (opcional)
1/2 cucharadita de pimentón dulce (opcional)
Jugo de medio limón (opcional para un toque fresco)
Queso rallado (opcional para gratinar)
Instrucciones:
Preparar las papas: Lava bien las papas para quitarles cualquier suciedad. Si prefieres una textura más crujiente, puedes pelarlas, aunque no es necesario. Corta las papas en rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor o en cubos, según tu preferencia.
Precalentar el horno: Precalienta tu horno a 200°C (390°F).
Sazonar las papas: En un tazón grande, mezcla las papas cortadas con el aceite de oliva, la sal, la pimienta, el ajo en polvo, el romero y cualquier otra especia que desees. Asegúrate de que las papas estén bien cubiertas con el aceite y los condimentos.
Hornear las papas: Coloca las papas sazonadas en una bandeja para hornear en una sola capa. Asegúrate de que no estén amontonadas para que se cocinen de manera uniforme. Hornea por 30-40 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes por fuera y suaves por dentro. Voltea las papas a la mitad del tiempo de cocción para que se doren por ambos lados.
Toque final: Si decides agregar queso, espolvoréalo sobre las papas durante los últimos 5 minutos de cocción, para que se derrita y se gratine.
Servir: Sírvelas calientes, acompañadas de una salsa de tu elección o como parte de tu comida principal.
