En sartén: Calienta un poco de aceite de oliva y dora las albóndigas a fuego medio, girándolas para que se cocinen de manera uniforme.
Servir y disfrutar: Acompaña con salsa de tomate, yogur griego o una salsa de tu preferencia.
Consejos para Servir y Almacenar
Servir: Son ideales con espaguetis, en wraps o como aperitivo con una salsa cremosa.
Almacenar: Guarda en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 4 días. Para congelarlas, colócalas en una bandeja hasta que estén firmes y luego guárdalas en bolsas herméticas hasta por 3 meses.
Variantes
Vegana: Sustituye el queso por levadura nutricional y los huevos por linaza o aquafaba.
Sin gluten: Usa pan rallado sin gluten o harina de almendra.
Más crujientes: Reboza las albóndigas en pan rallado antes de hornear o freír.
Con más sabor: Agrega especias como comino, curry o cebolla en polvo.
Preguntas Frecuentes
¿Puedo hacerlas sin horno?
Sí, puedes cocinarlas en sartén con un poco de aceite hasta que estén doradas por todos lados.
¿Se pueden hacer sin queso?
Sí, puedes omitirlo o sustituirlo por levadura nutricional para un toque de sabor umami.
¿Cómo evitar que se deshagan?
Asegúrate de escurrir bien la coliflor y no procesarla demasiado. Si la mezcla está muy húmeda, agrega más pan rallado.
¡Disfruta de estas deliciosas albóndigas de coliflor y experimenta con tus propias versiones! 🌱
