Introducción:
Los bolsillos de pavo rellenos son una opción deliciosa y diferente para sorprender en cualquier comida. Este plato combina la suavidad del pavo con el sabor único de los ingredientes del relleno, lo que lo convierte en un segundo plato lleno de sabor. Además, es fácil de preparar y se puede personalizar según los gustos de cada uno. Ideal para cenas familiares, fiestas o una comida especial, este plato seguro dejará a todos pidiendo más.
Ingredientes:
- 4 pechugas de pavo (sin hueso y sin piel)
- 200 g de espinacas frescas
- 150 g de queso ricotta o queso crema
- 1 diente de ajo picado
- 50 g de piñones tostados
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- ½ cucharadita de pimienta negra
- 1 huevo (para sellar)
- 100 ml de caldo de pollo (opcional)
- Hilo de cocina (para atar)
Instrucciones:
- Precalienta el horno a 180°C (350°F).
- En una sartén, calienta el aceite de oliva y saltea el ajo picado hasta que esté dorado. Agrega las espinacas y cocina hasta que se marchiten.
- Retira las espinacas del fuego y mezcla con el queso ricotta o queso crema y los piñones tostados. Sazona con sal y pimienta al gusto.
- Abre las pechugas de pavo, creando un “bolsillo” en el centro, sin llegar a cortarlas completamente.
- Rellena cada pechuga con la mezcla de espinacas y queso. Luego, cierra el bolsillo con hilo de cocina, asegurando el relleno en su interior.
- Coloca los bolsillos de pavo en una fuente para horno y rocía con un poco de caldo de pollo para mantener la jugosidad.
- Hornea durante 25-30 minutos o hasta que el pavo esté completamente cocido.
- Retira los hilos de cocina y sirve caliente.
Consejos para servir y almacenar:
- Puedes acompañar los bolsillos de pavo con una guarnición de puré de papas, arroz o una ensalada fresca.
- Si deseas un toque extra, agrega una salsa de vino blanco o salsa de champiñones por encima.
- Para almacenar, cubre los bolsillos de pavo sobrantes con plástico film o en un recipiente hermético y guárdalos en el refrigerador por hasta 3 días.
- También puedes congelarlos una vez cocidos. Para recalentarlos, hornea a 160°C (320°F) durante 15-20 minutos.
Variantes:
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