Introducción
El calabacín al horno con queso es una receta fácil de preparar, deliciosa y versátil, ideal para cualquier ocasión. Este plato combina la textura suave del calabacín con la cremosidad y el sabor del queso, logrando un equilibrio perfecto entre lo saludable y lo reconfortante. Además, es una excelente forma de incorporar más vegetales en tu dieta.
Ingredientes:
2 calabacines medianos.
150 g de queso rallado (puedes usar mozzarella, cheddar o una mezcla de quesos).
2 dientes de ajo picados.
2 cucharadas de aceite de oliva.
Sal y pimienta al gusto.
Una pizca de orégano seco (opcional).
Pan rallado (opcional, para un toque crujiente).
Instrucciones:
Precalienta el horno a 200°C (390°F) y engrasa ligeramente una bandeja para hornear con aceite de oliva.
Lava y corta los calabacines en rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor. Si prefieres, también puedes cortarlos a lo largo.
Coloca las rodajas de calabacín en la bandeja, asegurándote de que no se superpongan.
Mezcla el ajo picado con el aceite de oliva y pincela esta mezcla sobre las rodajas de calabacín.
Espolvorea sal, pimienta y orégano sobre los calabacines, según tu gusto.
Distribuye el queso rallado uniformemente sobre las rodajas. Si usas pan rallado, agrégalo ahora para un acabado dorado y crujiente.
Hornea durante 15-20 minutos, o hasta que el queso esté burbujeante y ligeramente dorado.