Calabacín en el Huerto: Errores Comunes al Plantarlo y Cómo Garantizar una Cosecha Abundante

Introducción
El calabacín es una de las hortalizas más productivas y fáciles de cultivar en el huerto. Sin embargo, su crecimiento puede verse afectado si se planta cerca de ciertos cultivos incompatibles. En este artículo, exploraremos qué plantas evitar junto al calabacín, además de compartir consejos clave para maximizar tu cosecha.

Ingredientes (Materiales Necesarios para el Cultivo)
Semillas o plántulas de calabacín
Tierra rica en materia orgánica
Abono natural o compost
Espacio adecuado con buena exposición solar
Riego constante pero moderado
Instrucciones para un Cultivo Exitoso
Elige un buen lugar: El calabacín necesita al menos 6 horas de sol directo al día y un suelo bien drenado.
Evita la competencia: No lo plantes junto a patatas, ya que ambas plantas compiten por nutrientes y pueden afectar su crecimiento. También es mejor mantenerlo alejado de hortalizas de la misma familia, como otras cucurbitáceas (pepino, melón o sandía), para evitar la propagación de enfermedades comunes.
Asocia con plantas beneficiosas: Algunas plantas como la albahaca o las capuchinas pueden ayudar a repeler plagas y mejorar su desarrollo.
Riego adecuado: Asegura un riego constante sin encharcar la tierra para evitar hongos.
Cosecha en el momento justo: Los calabacines deben recolectarse cuando aún están tiernos, generalmente entre 15 y 20 cm de largo, para que la planta siga produciendo frutos.
Consejos de Presentación y Almacenamiento
Frescura: Guarda los calabacines en un lugar fresco y seco, o en la nevera dentro de una bolsa perforada para prolongar su vida útil.
Conservación: Si tienes una gran cosecha, puedes congelarlos en rodajas después de blanquearlos en agua caliente durante un par de minutos.
Variaciones

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