En una licuadora, mezcla la leche condensada, la crema de leche, el cacao y el café disuelto.
Agrega el whisky y el extracto de vainilla. Licúa nuevamente hasta que todo quede bien integrado.
Prueba y ajusta el dulzor o la intensidad del café si es necesario.
Vierte la mezcla en una botella de vidrio bien cerrada y refrigera antes de servir.
Consejos para Servir y Almacenar:
Sírvelo frío con hielo o agrégalo a tu café para un toque especial.
Guárdalo en el refrigerador en una botella hermética hasta por un mes.
Agítalo bien antes de servir, ya que los ingredientes pueden separarse con el tiempo.
Variantes:
Sin alcohol: Sustituye el whisky por leche evaporada y un poco de extracto de almendra para un sabor similar.
Más cremoso: Añade una cucharada de dulce de leche o caramelo líquido para un toque extra de suavidad.
Sabor avellanado: Agrega una cucharadita de licor de avellana para una versión diferente.
Preguntas Frecuentes:
¿Puedo usar otro tipo de licor en lugar de whisky?
Sí, aunque el whisky irlandés es lo tradicional, puedes usar bourbon o ron para un giro distinto en el sabor.
¿Cuánto dura este licor casero?
Si lo guardas bien refrigerado en una botella hermética, puede durar hasta un mes.
¿Se puede hacer sin lactosa?
Sí, puedes usar leche condensada sin lactosa y crema vegetal para una versión apta para intolerantes a la lactosa.
¡Disfruta de tu Baileys casero y sorprende a tus invitados con esta receta fácil y deliciosa!
