Introducción: El Nido de Mousse de Leche es un postre suave y delicado que encantará a todos los amantes de los sabores cremosos y dulces. Con una textura aireada y ligera, este mousse se convierte en un acompañante perfecto para cualquier ocasión especial. Este plato no solo es un deleite para el paladar, sino también una obra de arte visual que sorprenderá a tus invitados.
Ingredientes:
1 taza de leche condensada
1 taza de crema para batir
1 cucharadita de esencia de vainilla
3 claras de huevo
1/2 taza de azúcar
1 cucharada de gelatina sin sabor
1/4 de taza de agua fría
1/4 de taza de agua caliente
Instrucciones:
Preparar la gelatina: Disolver la gelatina en agua fría, luego agregar el agua caliente y mezclar hasta que se disuelva completamente. Reservar.
Batir las claras: En un tazón grande, batir las claras de huevo a punto de nieve con el azúcar hasta obtener una consistencia firme y brillante.
Mezclar la crema: En otro tazón, batir la crema para batir hasta que esté espesa. Agregar la esencia de vainilla y la leche condensada.
Incorporar la gelatina: Añadir la gelatina disuelta a la mezcla de crema y leche condensada, revolviendo suavemente.
Agregar las claras batidas: Con cuidado, integrar las claras batidas a la mezcla, usando movimientos envolventes para no perder la textura aireada.
Formar el nido: En un molde o recipiente de tu preferencia, verter la mezcla y darle forma de nido. Dejar enfriar en la nevera durante al menos 4 horas, o hasta que esté completamente cuajado.
Servir y decorar: Una vez listo, desmoldar con cuidado y decorar con frutas frescas o un toque de salsa de frutas.
Consejos para servir y almacenar:
Servir frío: Este postre se disfruta mejor cuando está bien frío y firme.
Almacenamiento: Guarda el mousse en la nevera en un recipiente hermético por hasta 3 días. Si lo quieres más fresco, puedes prepararlo la noche anterior.
Decoración adicional: Puedes adornar el mousse con frutas como fresas, frambuesas o moras para darle un toque de frescura.
Variaciones: