El Secreto para un Hígado Más Sabroso: Receta Tradicional que Sorprenderá tu Paladar

Introducción: El hígado es uno de esos ingredientes que, aunque no siempre es el favorito de todos, cuando se prepara correctamente, puede convertirse en una delicia culinaria. No solo es rico en hierro y nutrientes esenciales, sino que también es un plato lleno de sabor y versatilidad. En este artículo, descubrirás una receta tradicional italiana que transformará tu percepción del hígado. Si alguna vez has tenido dudas sobre cómo prepararlo de manera sabrosa, ¡este es el secreto que estabas esperando!

Ingredientes:

500 gramos de hígado de ternera, cortado en rodajas finas
2 cebollas medianas, cortadas en juliana
2 dientes de ajo picados
1/2 taza de vino blanco seco
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 cucharada de vinagre balsámico
Sal y pimienta al gusto
Perejil fresco picado para decorar
Limón en rodajas (opcional)
Instrucciones:

Preparar el hígado: Lava bien el hígado bajo agua fría y sécalo con toallas de papel. Si prefieres un sabor más suave, puedes dejarlo reposar en leche durante 30 minutos antes de cocinar.

Sofreír las cebollas y el ajo: En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade las cebollas y el ajo y sofríe hasta que estén dorados y caramelizados, unos 10-15 minutos.

Cocinar el hígado: Subir ligeramente el fuego y agregar el hígado a la sartén con las cebollas. Cocina durante 2-3 minutos por cada lado o hasta que esté dorado. Evita cocinar demasiado tiempo para que no quede duro.

Añadir el vino y vinagre: Una vez que el hígado esté dorado, vierte el vino blanco seco y el vinagre balsámico sobre el hígado. Deja que se cocine durante unos 5 minutos para que el líquido reduzca y se mezcle bien con los sabores.

Rectificar sazón: Añade sal y pimienta al gusto. Retira del fuego y espolvorea con perejil fresco.

Servir: Acompaña el hígado con rodajas de limón, que puedes exprimir justo antes de comer para darle un toque fresco y ácido.

Consejos para servir y almacenar:

Sirve el hígado con puré de papas o una guarnición de verduras asadas para un plato más completo.
Si sobra, puedes guardarlo en un recipiente hermético en la nevera durante 2-3 días. Para recalentar, utiliza un fuego bajo para evitar que se endurezca.
Variaciones:

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