Estofado irlandés clásico: receta reconfortante para el alma

Introducción:
El estofado irlandés es un plato tradicional que combina ingredientes sencillos pero sabrosos para crear una comida deliciosa y reconfortante. Con su mezcla de carne tierna, papas cremosas y zanahorias dulces, este guiso es ideal para un día frío. Con esta receta podrás recrear un sabor auténtico de Irlanda en la comodidad de tu hogar.

Ingredientes:

1 kg de carne de res (preferiblemente de corte para estofado)
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cebolla grande, picada
3 dientes de ajo, picados
4 zanahorias, peladas y cortadas en rodajas
6 papas medianas, peladas y cortadas en trozos
500 ml de caldo de carne
300 ml de cerveza negra (como Guinness)
2 hojas de laurel
Sal y pimienta al gusto
1 cucharadita de tomillo fresco o seco
1 cucharadita de perejil fresco (opcional, para decorar)
Instrucciones:

Preparar la carne:
Corta la carne de res en trozos grandes. Sazona con sal y pimienta al gusto.
Sellar la carne:
En una cazuela grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto. Agrega los trozos de carne y dóralos por todos lados hasta que estén bien sellados.
Sofreír las verduras:
Añade la cebolla y el ajo a la cazuela. Cocina durante unos minutos hasta que la cebolla esté suave.
Agregar los líquidos:
Vierte el caldo de carne y la cerveza negra en la cazuela. Remueve bien, asegurándote de despegar los restos de carne dorada que se hayan quedado pegados al fondo.
Cocinar el estofado:
Incorpora las zanahorias, papas, hojas de laurel y tomillo. Lleva a ebullición, luego reduce el fuego y cocina a fuego lento durante aproximadamente 2 horas o hasta que la carne esté tierna y las verduras cocidas.
Ajustar sazón:
Prueba el estofado y ajusta la sal y pimienta según tu preferencia. Retira las hojas de laurel antes de servir.
Consejos para servir y almacenar:

Servir: El estofado irlandés es ideal para acompañar con pan crujiente o una rebanada de pan de soda irlandés.
Almacenar: Si te sobra, guarda el estofado en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días. También puedes congelarlo por hasta 3 meses. Solo asegúrate de dejar que se enfríe completamente antes de guardarlo.
Recalentar: Para recalentar, calienta a fuego bajo en una sartén o en el microondas hasta que esté bien caliente.
Variaciones:

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