Introducción:
El pan turco, conocido por su textura aireada y suavidad incomparable, es un clásico en la gastronomía oriental. Los “globos de pan turco”, o pide en algunas regiones, son famosos por su forma redonda y su capacidad para mantenerse fresco durante más tiempo. En esta receta, te enseñaremos cómo lograr ese pan suave y esponjoso, un deleite perfecto para acompañar cualquier plato o disfrutar solo con un toque de aceite de oliva. Atrévete a sorprender a tus seres queridos con este pan casero que desborda sabor y tradición.
Ingredientes:
500 gramos de harina de trigo (de preferencia de fuerza)
320 ml de agua tibia
10 gramos de sal
10 gramos de azúcar
20 gramos de levadura fresca
2 cucharadas de aceite de oliva
1 huevo (opcional, para pintar la masa)
Instrucciones:
Preparar la levadura: En un recipiente pequeño, disuelve el azúcar en el agua tibia. Añade la levadura fresca y deja reposar durante 10 minutos, o hasta que se forme una espuma en la superficie.
Mezclar los ingredientes secos: En un bol grande, tamiza la harina y la sal.
Amasar la masa: Haz un hueco en el centro de la harina y vierte la mezcla de levadura y agua, además del aceite de oliva. Mezcla hasta integrar todos los ingredientes y amasa durante 10 minutos hasta que obtengas una masa suave y elástica.
Reposar la masa: Forma una bola con la masa y colócala en un bol ligeramente aceitado. Cubre con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.
Dar forma a los panes: Divide la masa en pequeñas porciones y forma bolas. Colócalas en una bandeja de horno forrada con papel de hornear, dejando suficiente espacio entre ellas.
Cocinar los globos: Precalienta el horno a 220ºC. Si deseas, pincela las bolas con huevo batido para darle un brillo dorado. Hornea durante 12-15 minutos o hasta que estén doradas y esponjosas al tacto.
Dejar enfriar: Retira del horno y deja enfriar sobre una rejilla antes de servir.
Consejos para servir y almacenar:
El pan turco es perfecto para acompañar cualquier tipo de comida, desde sopas y ensaladas hasta carnes y vegetales.
Si deseas un pan aún más suave, puedes cubrirlo con un paño limpio justo después de hornearlo.
Almacena los globos de pan turco en una bolsa de papel o envueltos en un paño limpio para mantener su frescura. Si no los consumes en el día, puedes congelarlos y recalentarlos fácilmente en el horno.
Este pan es ideal para hacer deliciosas combinaciones con aceite de oliva, hierbas o incluso queso.
Variantes: