Introducción:
Si te has encontrado sin acceso a un horno o estufa, pero aún deseas disfrutar de un delicioso pan casero, ¡este pan sencillo es para ti! Con ingredientes simples y un proceso rápido, este pan es ideal para aquellos momentos en los que el tiempo es corto o las herramientas de cocina son limitadas. En solo 30 minutos, tendrás un pan suave y esponjoso, listo para acompañar tus comidas o disfrutar con tus toppings favoritos.
Ingredientes:
2 tazas de harina de trigo
1 cucharadita de levadura en polvo
1/2 cucharadita de sal
1 cucharada de azúcar
1/2 taza de agua tibia
1 cucharada de aceite de oliva (opcional)
1/4 taza de leche (opcional para mayor suavidad)
Instrucciones:
Mezclar los ingredientes secos: En un bol grande, mezcla la harina, la levadura en polvo, la sal y el azúcar.
Añadir los líquidos: Agrega el agua tibia poco a poco, mezclando hasta que la masa se forme. Si deseas, añade aceite de oliva o leche para hacerla más suave.
Amasar la masa: Coloca la masa sobre una superficie limpia y amasa durante unos 5 minutos hasta que esté suave y homogénea.
Dejar reposar: Cubre la masa con un paño limpio y deja reposar durante unos 10 minutos en un lugar cálido.
Cocinar sin horno: En una sartén antiadherente grande, calienta a fuego medio. Coloca la masa en la sartén, cubre con una tapa y cocina durante unos 15 minutos, volteando a mitad de cocción para que se dore de manera uniforme.
Servir: Retira el pan de la sartén y deja enfriar un poco antes de cortarlo.
Consejos para servir y almacenar:
Servir: Este pan es perfecto para acompañar sopas, ensaladas o para hacer sandwiches. Puedes untarlo con mantequilla o mermelada para un desayuno delicioso.
Almacenar: Guarda el pan en una bolsa de plástico o envuelto en un paño limpio. Consérvalo a temperatura ambiente por hasta 3 días, o en el refrigerador por hasta una semana. Puedes congelarlo también si no lo vas a consumir de inmediato.
Variaciones: