Introducción
La pasta parmesana de pollo es un plato cremoso y reconfortante que combina los sabores suaves del pollo jugoso, la intensidad del queso parmesano y la textura perfecta de la pasta al dente. Este plato no solo es fácil de preparar, sino que también es ideal para cenas familiares o para sorprender a tus invitados en una ocasión especial.
Ingredientes:
300 g de pechugas de pollo, cortadas en tiras
250 g de pasta (penne, fettuccine o tu favorita)
3 dientes de ajo, finamente picados
2 cucharadas de aceite de oliva
1 taza de crema para cocinar
½ taza de queso parmesano rallado
1 taza de caldo de pollo
½ cucharadita de sal
¼ cucharadita de pimienta negra
1 cucharada de perejil fresco, picado (opcional)
Instrucciones:
Cocina la pasta: Hierve agua con sal en una olla grande. Cocina la pasta según las instrucciones del paquete hasta que esté al dente. Escurre y reserva.
Sazona y cocina el pollo: En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Sazona las tiras de pollo con sal y pimienta y cocínalas durante 6-8 minutos o hasta que estén doradas y cocidas. Retira el pollo y reserva.
Prepara la salsa: En la misma sartén, agrega los dientes de ajo picados y sofríe por 1-2 minutos hasta que estén fragantes. Agrega la crema para cocinar y el caldo de pollo, y lleva la mezcla a fuego lento.
Incorpora el parmesano: Agrega el queso parmesano rallado a la sartén y mezcla hasta que se derrita y la salsa esté suave.
Combina los ingredientes: Regresa el pollo cocido a la sartén y mezcla bien. Agrega la pasta cocida y revuelve para cubrirla uniformemente con la salsa.
Sirve: Retira del fuego, espolvorea con perejil fresco (si lo deseas) y sirve inmediatamente.