Introducción
El perejil es una de las hierbas más populares en la cocina, aportando frescura y un toque vibrante a una variedad de platos. Sin embargo, uno de los grandes desafíos al utilizar esta hierba es su corta vida útil. Si alguna vez has comprado un ramo de perejil solo para ver cómo se pudre en poco tiempo, este artículo es para ti. Hoy descubrirás un truco secreto utilizado por chefs profesionales para conservar el perejil fresco durante meses, evitando que se estropee y aprovechando al máximo su sabor.
Ingredientes
1 manojo de perejil fresco
Agua filtrada
Un frasco o tarro de vidrio con tapa
Un paño o toalla de papel limpio
Instrucciones
Lavar y preparar el perejil: Comienza por enjuagar bien el perejil bajo agua fría para eliminar cualquier suciedad o residuo de pesticidas. Sacude suavemente el exceso de agua y seca ligeramente con una toalla de papel.
Recortar los tallos: Corta las raíces del perejil, dejando los tallos principales intactos. Esto ayudará a mantenerlo más fresco por más tiempo.
Colocar en agua: Llena un frasco o tarro de vidrio con aproximadamente 5 cm de agua filtrada. Coloca el perejil dentro del frasco, asegurándote de que los tallos estén sumergidos en el agua mientras que las hojas queden fuera del líquido.
Cubrir con un paño: Coloca un paño limpio o una toalla de papel sobre el tarro y cierra con una tapa (si es necesario) para crear un ambiente más controlado y libre de contaminantes.
Almacenar en el lugar adecuado: Guarda el tarro en el refrigerador o en un lugar fresco y oscuro. Cambia el agua cada 2 o 3 días para mantener el perejil fresco por más tiempo.
Consejos de presentación y almacenamiento
Si prefieres evitar el uso de agua, también puedes envolver el perejil seco en un paño limpio y almacenarlo en una bolsa plástica perforada en el refrigerador.
Asegúrate de mantener el perejil lejos de alimentos que liberen gases etileno, como manzanas, ya que esto puede acelerar su deterioro.
Si deseas almacenar el perejil durante mucho tiempo, puedes congelarlo. Para hacerlo, pica el perejil, colócalo en una bandeja y congélalo antes de transferirlo a una bolsa de congelación. De esta forma, podrás usarlo directamente en sopas y guisos.
Variaciones
