Introducción:
El pollo con chorizo y sidra es un plato lleno de sabor, ideal para aquellos que buscan una receta con ingredientes sencillos pero deliciosos. La combinación de pollo tierno, chorizo sabroso y la frescura de la sidra crea una armonía perfecta entre lo salado y lo ligeramente ácido. Esta receta es perfecta para una comida familiar o para sorprender a tus invitados con algo diferente.
Ingredientes:
4 muslos de pollo (puedes usar pechugas si prefieres)
200 g de chorizo (preferentemente fresco o curado, según tu gusto)
1 cebolla grande, picada
2 dientes de ajo, picados finamente
1 taza de sidra (preferiblemente seca)
1 hoja de laurel
1 ramita de romero
Sal y pimienta al gusto
Aceite de oliva para cocinar
1 taza de caldo de pollo (opcional, dependiendo de la consistencia deseada)
Instrucciones:
Preparar los ingredientes:
Corta el chorizo en rodajas gruesas.
Sazona el pollo con sal y pimienta al gusto.
Cocinar el pollo:
En una cazuela grande, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio-alto. Agrega el pollo y dóralo por ambos lados. Esto tomará unos 6-8 minutos. Retira el pollo y resérvalo.
Sofrito:
En la misma cazuela, agrega la cebolla y el ajo. Cocina hasta que la cebolla esté transparente, aproximadamente 5 minutos.
Agregar el chorizo:
Incorpora el chorizo a la cazuela y cocina hasta que se dore ligeramente, soltando su grasa y sabor.
Desglasar con sidra:
Vierte la sidra en la cazuela para desglasar, raspa los restos de sabor pegados al fondo. Deja que la sidra hierva a fuego lento durante unos 3-4 minutos para reducir un poco.
Cocinar todo junto:
Regresa el pollo a la cazuela, añadiendo el laurel y el romero. Si deseas una salsa más espesa, puedes añadir un poco de caldo de pollo. Cocina a fuego bajo durante unos 30-40 minutos, o hasta que el pollo esté completamente cocido y los sabores se hayan integrado.
Finalizar y servir:
Retira el pollo, el chorizo y las hierbas de la cazuela. Sirve caliente, acompañado de puré de papas o una ensalada verde.
Consejos para servir y almacenar:
Servir: Este plato se puede acompañar con arroz, patatas o una ensalada fresca para equilibrar los sabores intensos. También es delicioso con pan crujiente para mojar en la salsa.
Almacenar: Guarda las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días. Este plato también se puede congelar por hasta un mes. Cuando lo descongeles, caliéntalo a fuego lento para que se mantenga jugoso.
Variaciones: