Introducción:
Las recetas de la abuela tienen un toque especial, un sabor a tradición que nos transporta a tiempos de tranquilidad y amor en la cocina. En Grecia, uno de los secretos más guardados de la cocina casera es la tarta de yogur. Con solo tres ingredientes, esta tarta es una explosión de frescura y sabor, perfecta para cualquier ocasión. Lo mejor de todo: es sencilla de preparar y no requiere grandes habilidades culinarias. ¡Descubre el secreto de la abuela griega que ha conquistado corazones durante generaciones!
Ingredientes:
2 tazas de yogur griego natural
1 taza de galletas digestivas o galletas de tu preferencia
1/4 taza de miel (opcional, para un toque dulce)
Instrucciones:
Preparar la base: Tritura las galletas hasta que queden bien desmenuzadas. Puedes hacerlo con un procesador de alimentos o colocando las galletas en una bolsa de plástico y golpeándolas con un rodillo.
Mezclar el yogur: En un tazón grande, mezcla el yogur griego con la miel (si decides usarla). Remueve hasta obtener una mezcla homogénea.
Formar la base de la tarta: Coloca las galletas trituradas en el fondo de un molde y presiona bien para que se compacte.
Verter el yogur: Vierte la mezcla de yogur sobre la base de galletas y alisa la superficie con una espátula.
Refrigerar: Deja que la tarta repose en la nevera durante al menos 4 horas, o preferiblemente, toda la noche, para que tome consistencia.
Servir y disfrutar: Decora con frutas frescas, nueces o un chorrito de miel si lo deseas. Sirve bien fría.
Consejos para servir y almacenar:
Servir: Esta tarta se disfruta mejor fría, así que asegúrate de refrigerarla por el tiempo necesario para que tome su mejor textura. Acompáñala con frutas frescas como fresas, arándanos o rodajas de kiwi para un contraste refrescante.
Almacenar: Puedes guardar la tarta en el refrigerador durante 2-3 días. Si te sobra, cúbrela bien con plástico adherente o en un recipiente hermético para mantenerla fresca.
Variaciones:
