Recetas saludables para el bienestar: Pasta vegana con ajo, parmesano y los beneficios de la cáscara de naranja y jengibre

Introducción:
La combinación de la cáscara de naranja y el jengibre es conocida por sus propiedades antiinflamatorias y digestivas, lo que la convierte en un aliado perfecto para las dolencias cotidianas. En este artículo, te presentamos una receta deliciosa de pasta vegana con ajo y parmesano, que incorpora estos ingredientes naturales, brindándote un toque único de sabor y salud. Disfruta de una comida reconfortante que no solo es sabrosa, sino que también apoya tu bienestar.

Ingredientes:

250 g de pasta integral o sin gluten
3 dientes de ajo, picados finamente
2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
1/4 de taza de queso parmesano vegano (opcional)
Cáscara de una naranja orgánica (bien lavada y rallada)
1 trozo pequeño de jengibre fresco, rallado (aproximadamente 1 cucharadita)
Sal y pimienta al gusto
Un puñado de albahaca fresca (opcional)
1 cucharadita de jugo de limón (opcional)
Instrucciones:

Cocina la pasta en abundante agua con sal según las instrucciones del paquete. Una vez cocida, escurre y reserva un poco del agua de la cocción.
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio y agrega el ajo picado. Cocina por unos 2 minutos, hasta que esté fragante.
Agrega la cáscara de naranja rallada y el jengibre fresco a la sartén. Cocina por un minuto más, removiendo constantemente.
Incorpora la pasta escurrida a la sartén, junto con un poco del agua reservada para ayudar a que la mezcla se mezcle bien.
Añade el queso parmesano vegano (si lo usas) y revuelve hasta que se derrita y la pasta esté bien cubierta.
Sazona con sal, pimienta y, si lo deseas, un chorrito de jugo de limón.
Sirve caliente, decorado con albahaca fresca si prefieres un toque herbáceo.
Consejos para servir y almacenar:

Puedes acompañar esta pasta con una ensalada fresca de hojas verdes o verduras asadas para una comida completa.
La pasta sobrante puede guardarse en un recipiente hermético en el refrigerador durante 2-3 días. Para recalentar, añade un poco de aceite de oliva o agua caliente para devolverle suavidad.
Si prefieres una opción sin gluten, usa pasta de arroz o quinoa.
Variantes:

vedere il seguito alla pagina successiva

Leave a Comment