Sopa Cremosa de Champiñones: Un Abrazo Caliente para Tu Estómago

Introducción: La sopa cremosa de champiñones es el plato perfecto para aquellos días fríos en los que solo un sabor reconfortante puede levantar el ánimo. Esta receta combina la suavidad de los champiñones con una textura cremosa que encanta a todos. Es una opción ideal para el almuerzo o la cena, fácil de preparar y muy sabrosa. Si te gustan los sabores intensos y las sopas que te hagan sentir como en casa, esta receta es para ti.

Ingredientes:

500 g de champiñones frescos, laminados
1 cebolla pequeña, picada finamente
2 dientes de ajo, picados
1 taza de caldo de pollo o vegetal
1 taza de crema de leche
2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de harina
1/2 taza de leche
Sal y pimienta al gusto
Aceite de oliva (opcional para saltear)
Perejil fresco picado (opcional para decorar)
Instrucciones:

En una olla grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo picado, y saltea por unos minutos hasta que se suavicen y se tornen transparentes.
Añade los champiñones laminados y cocina hasta que se ablanden, unos 5-7 minutos. Si es necesario, agrega un poco de aceite de oliva.
Espolvorea la harina sobre los champiñones y mezcla bien para que se integre. Cocina durante un par de minutos para eliminar el sabor a harina cruda.
Vierte el caldo caliente y revuelve constantemente para evitar que se formen grumos. Cocina por 10 minutos, permitiendo que los sabores se fusionen.
Reduce el fuego y agrega la leche y la crema de leche. Cocina a fuego lento durante 5 minutos más. Ajusta la sazón con sal y pimienta.
Si prefieres una sopa más suave, puedes licuarla con una batidora de inmersión o en una licuadora hasta obtener una textura cremosa.
Sirve caliente, decorada con perejil fresco picado si lo deseas.
Consejos para servir y almacenar:

Acompaña la sopa con pan crujiente o una ensalada fresca para una comida completa.
Para almacenar, coloca la sopa en un recipiente hermético y refrigérala por hasta 3 días. También puedes congelarla hasta por 1 mes. Al descongelar, caliéntala a fuego lento y ajusta la textura si es necesario agregando un poco de leche.
Variantes:

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