Tarta de Queso Crema y Mantequilla de Maní sin Horno con Crema Batida de Chocolate

Introducción
Si eres amante del queso crema, la mantequilla de maní y el chocolate, esta receta es para ti. La combinación de una base crujiente, un relleno cremoso y una cubierta de chocolate batido crea un postre irresistible. Además, no necesitas horno, lo que la convierte en una opción fácil y perfecta para cualquier ocasión.

Ingredientes
Para la base:
200 g de galletas tipo digestive o de chocolate
100 g de mantequilla derretida
Para el relleno:
250 g de queso crema a temperatura ambiente
½ taza de mantequilla de maní cremosa
½ taza de azúcar glas
1 cucharadita de extracto de vainilla
200 ml de nata para montar (crema para batir)
Para la crema batida de chocolate:
200 ml de nata para montar (crema para batir)
2 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar
2 cucharadas de azúcar glas
Instrucciones
Preparar la base:

Tritura las galletas hasta obtener una textura arenosa.
Mezcla con la mantequilla derretida y presiona la mezcla en el fondo de un molde desmontable.
Refrigera durante 30 minutos para que se compacte.
Preparar el relleno:

Bate el queso crema con la mantequilla de maní hasta que la mezcla esté suave y homogénea.
Agrega el azúcar glas y el extracto de vainilla, mezclando bien.
En otro bol, bate la nata hasta que forme picos firmes y luego intégrala suavemente a la mezcla de queso y mantequilla de maní.
Vierte esta mezcla sobre la base de galletas y refrigera por al menos 4 horas o hasta que esté firme.
Preparar la crema batida de chocolate:

Bate la nata bien fría junto con el cacao en polvo y el azúcar glas hasta obtener una crema aireada y esponjosa.
Montaje:

Una vez que la tarta esté firme, extiende la crema batida de chocolate sobre la superficie de manera uniforme.
Puedes decorar con chips de chocolate, trocitos de maní o un chorrito de salsa de chocolate.
Consejos para servir y almacenar
Servir: Para cortar porciones limpias, usa un cuchillo caliente y pásalo por un paño seco antes de cada corte.
Almacenar: Guarda la tarta en el refrigerador hasta por 5 días en un recipiente hermético. También puedes congelarla sin la crema batida de chocolate y añadirla justo antes de servir.
Variantes

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