Introducción
¿Buscas un snack o desayuno que sea saludable, saciante y, además, te ayude a perder peso? Estos panecillos mágicos se han vuelto virales por una razón: no contienen harina ni azúcar, pero son increíblemente sabrosos. Hechos con ingredientes naturales y fáciles de conseguir, estos bocados ligeros son ideales para quienes siguen una dieta baja en carbohidratos refinados o simplemente desean comer mejor. ¡Y sí, desaparecen en menos de un minuto!
Ingredientes:
2 plátanos maduros (mientras más maduros, más dulces)
2 huevos
1 taza de copos de avena (pueden ser enteros o molidos ligeramente)
1 cucharadita de canela en polvo
1 cucharadita de polvo de hornear
1 pizca de sal
1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Un puñado de nueces, almendras o pasas (opcional)
Instrucciones:
Precalienta el horno a 180 °C (350 °F) y prepara una bandeja con moldes para muffins o una bandeja antiadherente.
Tritura los plátanos con un tenedor hasta que queden como un puré sin grumos.
Agrega los huevos y mezcla bien hasta integrar.
Añade la avena, la canela, la sal, el polvo de hornear y la vainilla. Mezcla todo hasta obtener una masa homogénea.
Si deseas, incorpora frutos secos o pasas para dar un toque crujiente o dulce natural.
Distribuye la mezcla en los moldes, llenando hasta ¾ de su capacidad.
Hornea durante 20–25 minutos o hasta que estén dorados y un palillo salga limpio al pinchar el centro.
Deja enfriar unos minutos y ¡listo! Prepárate para verlos desaparecer.
Consejos de presentación y almacenamiento:
Sírvelos tibios, acompañados de yogur griego o un té verde para un desayuno perfecto.
Puedes almacenarlos en un recipiente hermético hasta por 4 días en el refrigerador, o congelarlos por hasta 1 mes.
Para recalentarlos, solo mételos al microondas por 20 segundos o al horno por 5 minutos.
Variaciones: