Berenjenas Fritas Perfectas Sin Aceite Excesivo: El Truco Infalible

Introducción
Las berenjenas fritas son una deliciosa opción para acompañar tus comidas, pero a menudo el exceso de aceite puede hacerlas demasiado grasosas. Hoy te traemos un truco eficaz para disfrutar de unas berenjenas fritas crujientes y sabrosas, sin que te sobrecarguen de grasa. Con esta receta, podrás disfrutar de este platillo de una forma más ligera, manteniendo su sabor inconfundible.

Ingredientes:
2 berenjenas medianas
1 taza de harina de trigo (puedes usar harina de avena o integral para una opción más saludable)
1 huevo (opcional, puedes omitirlo si prefieres una opción vegana)
1 cucharadita de sal
1 cucharadita de pimienta negra
Aceite de oliva o aceite en spray (preferentemente)
Ajo en polvo (opcional)
Hierbas frescas como orégano o albahaca (opcional)
Instrucciones:
Preparación de las berenjenas: Lava bien las berenjenas y córtalas en rodajas finas, de aproximadamente 1 cm de grosor. Si prefieres que las berenjenas no amarguen, puedes espolvorearlas con sal y dejarlas reposar unos 15 minutos para que suelten el líquido. Luego, sécalas con un papel toalla.

Empanizado: En un bol, bate el huevo (si lo usas) y agrega una pizca de sal y pimienta al gusto. En otro recipiente, coloca la harina (y, si deseas, el ajo en polvo o hierbas). Pasa cada rodaja de berenjena primero por el huevo (si usas) y luego por la harina, asegurándote de cubrirlas bien.

Cocción: Calienta una sartén antiadherente a fuego medio y agrega una ligera capa de aceite. Para evitar usar demasiada grasa, puedes rociar el aceite con un pulverizador o utilizar un pincel para aplicar solo una pequeña cantidad. Fría las berenjenas por ambos lados hasta que estén doradas y crujientes, aproximadamente 3-4 minutos por cada lado.

Escurrir: Coloca las berenjenas fritas sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.

Consejos para servir y almacenar:
Servir: Estas berenjenas fritas son perfectas como aperitivo, acompañamiento de carnes o en ensaladas. Puedes añadir un toque de salsa de tomate o yogurt griego para darle más sabor.
Almacenar: Si te sobran, guarda las berenjenas en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 2 días. Para recalentarlas, colócalas en una sartén a fuego bajo, o en un horno precalentado a 180°C para recuperar su textura crujiente.
Variantes:

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