Introducción
Si estás buscando una receta fácil y deliciosa para preparar en cualquier momento del día, estos muffins de manzana y canela son la elección perfecta. Suave, esponjosa, y con un toque de especias, esta receta es ideal para acompañar tu café por la mañana o como un tentempié a cualquier hora. La combinación de manzana y canela no solo hace que estos muffins tengan un sabor increíble, sino que también llenan la cocina de una fragancia irresistible.
Ingredientes
1 taza de manzana rallada (aproximadamente 2 manzanas medianas)
1 1/2 tazas de harina para todo uso
1/2 taza de azúcar moreno
1/4 taza de aceite vegetal o mantequilla derretida
1 huevo
1/2 taza de leche
1 cucharadita de polvo de hornear
1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
1 cucharadita de canela en polvo
1/4 cucharadita de sal
1 cucharadita de extracto de vainilla
Instrucciones
Precalienta el horno: Precalienta tu horno a 180°C (350°F) y coloca capacillos de papel en un molde para muffins.
Mezcla los ingredientes secos: En un tazón grande, mezcla la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio, la canela y la sal.
Prepara los ingredientes húmedos: En otro tazón, bate el huevo con el azúcar moreno hasta que esté bien combinado. Agrega el aceite (o mantequilla derretida), la leche y la vainilla. Mezcla bien.
Agrega la manzana: Incorpora la manzana rallada en la mezcla de ingredientes húmedos y revuelve bien.
Combina los ingredientes: Añade gradualmente los ingredientes secos a los húmedos, mezclando con una espátula hasta que todo esté bien integrado. Evita mezclar en exceso para que los muffins queden esponjosos.
Hornea: Vierte la mezcla en los moldes de muffins, llenándolos hasta 2/3 de su capacidad. Hornea durante 20-25 minutos o hasta que al insertar un palillo, este salga limpio.
Deja enfriar: Retira los muffins del horno y déjalos enfriar en el molde durante unos 5 minutos antes de transferirlos a una rejilla para que se enfríen por completo.
Consejos para servir y almacenar
Servir: Estos muffins son perfectos por sí solos, pero también puedes acompañarlos con un poco de mantequilla derretida o crema de queso para un extra de sabor.
Almacenar: Guarda los muffins en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 3 días. Si deseas que duren más, puedes refrigerarlos hasta por 5 días. También se pueden congelar y disfrutar en otro momento.
Variaciones
