El secreto de unas patatas fritas crujientes: trucos infalibles de los chefs

Introducción
Las patatas fritas son un clásico irresistible en cualquier mesa, pero lograr que queden doradas y crujientes por fuera, sin estar aceitosas o blandas, puede ser todo un desafío. Afortunadamente, los chefs tienen algunos trucos que garantizan un resultado perfecto en cada bocado. En este artículo, te revelaremos los secretos mejor guardados para que puedas preparar patatas fritas crujientes en casa, sin complicaciones y con un sabor espectacular.

Ingredientes
Para preparar unas patatas fritas perfectas, necesitarás:

4 patatas grandes (preferiblemente variedades harinosas como Russet o Agria)
Aceite vegetal o de girasol para freír
Sal al gusto
Opcional: ajo en polvo, pimentón, pimienta negra o hierbas aromáticas para darle un toque especial
Instrucciones
Elige y corta las patatas: Pela las patatas y córtalas en tiras uniformes para asegurar una cocción pareja. Un grosor ideal es de aproximadamente 1 cm.
Remoja las patatas: Coloca las patatas en un bol con agua fría durante al menos 30 minutos o hasta 2 horas. Esto ayuda a eliminar el exceso de almidón y las vuelve más crujientes.
Sécalas bien: Escurre las patatas y sécalas completamente con un paño limpio o papel absorbente. La humedad en el aceite caliente puede hacer que las patatas queden blandas y provoquen salpicaduras peligrosas.
Freír en dos tiempos:
Primera fritura: Calienta el aceite a 150-160°C y fríe las patatas en tandas durante 3-4 minutos hasta que estén tiernas, pero sin dorarse. Retíralas y colócalas sobre papel absorbente.
Segunda fritura: Sube la temperatura del aceite a 180-190°C y vuelve a freírlas hasta que estén doradas y crujientes, aproximadamente 2-3 minutos más.
Escurre y sazona: Retira las patatas del aceite y colócalas sobre papel absorbente. Añade sal y especias al gusto mientras aún están calientes.
Consejos para servir y almacenar
Servir caliente: Las patatas fritas son mejores recién hechas. Sírvelas de inmediato para disfrutar de su textura crujiente.
Mantenerlas calientes: Si necesitas conservarlas por unos minutos antes de servir, colócalas en una rejilla dentro del horno precalentado a 100°C.
Almacenar sobras: Guarda las patatas fritas en un recipiente hermético en la nevera por hasta 2 días. Para recalentarlas, hornéalas a 200°C durante unos minutos o fríelas nuevamente en poco aceite.
Variaciones

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