Introducción: El pastel de piña al revés es un clásico que nunca pasa de moda. Su combinación de piña caramelizada y un suave bizcocho lo convierte en un postre irresistible, perfecto para cualquier ocasión. Este pastel retro, con su toque jugoso y dulce, invita a revivir tiempos pasados mientras nos deleitamos con un sabor cálido y reconfortante. Ya sea para un cumpleaños, una reunión familiar o simplemente para disfrutar en casa, su preparación sencilla y su encanto vintage harán que todos se queden pidiendo más.
Ingredientes:
1 lata de piña en rodajas (en su jugo o en almíbar)
1 taza de azúcar moreno
1/4 taza de mantequilla derretida
1 taza de harina
1 taza de azúcar blanca
1/2 taza de leche
1/4 taza de aceite vegetal
2 huevos
1 cucharadita de polvo de hornear
1 cucharadita de esencia de vainilla
Una pizca de sal
Instrucciones:
Precalienta el horno a 180°C (350°F). Engrasa ligeramente un molde redondo de 22 cm de diámetro.
Coloca las rodajas de piña en el fondo del molde, formando una capa uniforme. Reserva el jugo de la piña para el bizcocho.
En un tazón pequeño, mezcla el azúcar moreno con la mantequilla derretida. Vierte esta mezcla sobre las piñas en el molde, asegurándote de cubrir bien las rodajas.
En otro tazón grande, bate los huevos con el azúcar blanca hasta obtener una mezcla cremosa. Agrega el aceite y la esencia de vainilla.
Tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal. Incorpóralos gradualmente a la mezcla de huevos, alternando con la leche. Mezcla hasta obtener una masa suave.
Vierte la masa sobre las piñas en el molde, alisando la superficie.
Hornea durante 30-35 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
Deja enfriar el pastel en el molde durante 10 minutos, luego desmóldalo con cuidado, invertido sobre un plato grande.
Consejos para servir y almacenar:
Sirve el pastel tibio, acompañado de una bola de helado de vainilla o crema batida para un toque extra de indulgencia.
Si te sobra pastel, guárdalo en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante 2-3 días. También puedes refrigerarlo para conservarlo por más tiempo.
Para recalentar, simplemente coloca una porción en el microondas por 20-30 segundos o caliéntalo en el horno a baja temperatura.
Variantes: