Patatas Crujientes al Horno: La Receta Irresistible que se Convertirá en Tu Favorita

Introducción
Las patatas crujientes y sabrosas son el acompañante perfecto para cualquier comida, pero ¿quién no disfruta de un platillo sencillo que sea tan delicioso como fácil de hacer? Con esta receta, aprenderás cómo preparar unas patatas doradas, crujientes por fuera y suaves por dentro, ¡en solo unos minutos! Perfectas para una comida rápida, como aperitivo o incluso para acompañar carne, pescado o ensaladas.

Ingredientes:

4 patatas medianas (preferentemente tipo russet)
3 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharadita de sal
½ cucharadita de pimienta negra
1 cucharadita de ajo en polvo
1 cucharadita de cebolla en polvo
½ cucharadita de pimentón dulce (opcional)
Ramitas de romero fresco (opcional)
Instrucciones:

Precalienta el horno a 200°C (390°F).
Lava y pela las patatas (si lo prefieres, puedes dejarlas con la piel). Corta las patatas en trozos medianos o en rodajas gruesas para que se cocinen de manera uniforme.
Prepara la mezcla de especias: en un bol grande, mezcla el aceite de oliva, sal, pimienta, ajo en polvo, cebolla en polvo y pimentón dulce.
Añade las patatas al bol con la mezcla de especias y revuelve bien para que todas las piezas queden cubiertas de manera uniforme.
Extiende las patatas en una bandeja para hornear, asegurándote de que no se superpongan, de lo contrario no quedarán tan crujientes.
Hornea durante 35-40 minutos, volteando las patatas a mitad de cocción, hasta que estén doradas y crujientes por fuera.
Retira del horno y decora con ramitas de romero fresco si deseas. Sirve caliente y disfruta.
Consejos para servir y almacenar:

Servir: Estas patatas son ideales como acompañante de carnes, pescados o incluso como snack con una salsa de tu elección (como mayonesa, salsa de ajo o ketchup).
Almacenaje: Si te sobra, puedes guardar las patatas en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días. Para que queden crujientes nuevamente, simplemente caliéntalas en el horno durante unos minutos.
Congelar: Puedes congelar las patatas crujientes antes de hornearlas. Después de mezclarlas con el aceite y las especias, extiéndelas en una bandeja y congélalas. Cuando estén congeladas, guárdalas en una bolsa o recipiente hermético. Solo tendrás que hornearlas cuando las desees comer.
Variaciones:

vedere il seguito alla pagina successiva

Leave a Comment